Jesús Calleja, leonés, es alpinista, explorador y comunicador.
Toda su vida ha estado centrada en la montaña. Empezó y aprendió a escalar en las montañas de Castilla y León, en los Picos de Europa y sus montañas aledañas. Cuando las pateó enteritas, buscó más montañas en la cordillera del Himalaya. Sólo a Nepal, donde ha sido guía de montaña durante más de 16 años, ¡ha viajado en más de 60 ocasiones!
Cuando atacó las cumbres más altas comprobó que estaba enganchado. Entonces buscó un pretexto para continuar y se convirtió en un alpinista/comunicador.
A través del programa de televisión Desafío Extremo, que ha emitido 7 temporadas en Cuatro, ha viajado infinidad de veces por los cinco continentes relatando aventuras con emoción y con humor. A lo largo de los más de cincuenta episodios ha contado sus expediciones:
Ha escalado 3 ochomiles; El Everest, el Lhotse y el Cho Oyu, ha alcanzado la cima de las 7 cumbre más altas de cada continente; además del Everest en Asia, el Elbrus, en Europa, la Pirámide de Carstenz en Oceanía, el McKinley en América del Norte, el Vinson en la Antártida, el Kilimanjaro en Africa, y la Aconcagua en América del Sur. Ha alcanzado mediante una expedición terrestre el Polo Norte, y ha visitado la Antártida en viajes de exploración por mar y por aire, en 3 ocasiones.
Es amante de los vehículos: es piloto de avionetas, de helicópteros, de motos y coches. Ha participado en 2 Rallies de Faraones, en Egipto, en 1 Rally Dakar americano y en el África Race, el Dakar africano.
Y como siempre busca nuevas emociones, ha aprendido a bucear, y se ha encontrado con tiburones; tigre, oceánico, blanco, ha batido récords de distancia en globos aerostáticos, en el Amazonas y en Laponia en invierno, ha pilotado en África en para-motor, ha navegado por el Cabo de Hornos, ha ascendido a volcanes en erupción, en el Congo, en Vanuato y en Ecuador, ha explorado Buthan buscando al yeti, Siberia buscando nómadas, Svalvard buscando osos polares, ha competido en una Maratón profesional de Etiopia, y ha realizado una hazaña de espeleología brutal; el descenso hasta 1650 metros de profundidad en la cavidad más honda del planeta; la Cueva Krubera-Voronia, en Abjasia.
Optimista vital, siempre aprende y busca la empatía mediante el humor con las personas a su alrededor, y con gentes de otras culturas, su pasión. Explora los propios límites para superarlos y se esfuerza al máximo para estar a punto de acometer cualquier proyecto con la máxima capacidad física y de conocimiento y abordarlo con un entusiasmo infinito.